Egipto, Túnez y las dictaduras socialistas

Hoy en día las personas, sobre todo la juventud, están hartas de los gobiernos autoritarios y sus nefastas consecuencias en la vida social y económica. Por tal motivo se sublevan exigiendo la dimisión de jefes de estado cuyo puesto es casi vitalicio, líderes aupados en una aparente voluntad electoral. Otros entienden que la autentica democracia puede ser una respuesta para salir de la crisis que les acongoja. Tomaron conciencia, también, que los países más desarrollados y con mejor calidad de vida -con respecto a ellos- emplean este sistema que administra la libertad y distribuye el poder de manera más efectiva y justa. No se trata de ser “apolítico” como ocurre en el caso de Honduras donde la democracia se despilfarra con la venia de la clase política, sino de buscar las mejores opciones bajo el enfoque de la razón y la buena voluntad del pueblo.

Lo que ocurrió en Túnez y acontece en Egipto es, desde el punto de vista político, algo necesario para obtener más libertades en miras del progreso, pero desde el aspecto social, es una tragedia que repercute negativamente en la población ¿Por qué? La Historia nos enseña que la revolución devenga mucho sufrimiento y sangre para el pueblo que la emprende. Es mejor ir reformando las cosas de manera gradual que evite tanto daño y produzca mucho resentimiento. Pero cuando se toca fondo, la violencia, por desgracia, es casi inminente.

Ahora bien, esto es lo que se deduce si tomamos como base la información de algunos medios periodísticos. Sin embargo, y teniendo presente la experiencia de la crisis política del 2009 en Honduras, no podemos limitar el conocimiento a una sola fuente de información, ante todo si es tendenciosa y dice verdades a medias. Por fortuna ahora la población del mundo cuenta con Internet, canal por el cuál podemos informarnos para después cotejar todos los datos que conciernen a tal o cual suceso, así sacamos nuestras propias ideas. El empleo de redes sociales electrónicas juega un papel importante para que se lleven acabo levantamientos como los que ocurren en Egipto; por eso, los regímenes más autoritarios (entre ellos China, Cuba, Irán, ahora Venezuela) imponen una fuerte censura sobre los contenidos en Internet para mantener a los ciudadanos bajo control y así evitar que los denuncien. A veces uno se pregunta al revisar las noticias ¿Lo que acontece en el Norte de África es una manifestación de todos los pueblos o simplemente una revuelta islámica para conseguir el poder? La duda vale.

Parece que en todo el mundo piden la cabeza de Hosni Mubarak, líder Egipcio. El partido de Mubarak pertenece, o más bien pertenecía, a la Internacional Socialista luego que fue expulsado de dicha organización a causa de la actual crisis. Igual sentencia se le impuso al partido del derrocado presidente de Túnez, Ben Ali . O sea, son dictaduras socialistas que han sido asolapadas todos estos años. Miren ustedes qué bonito, hasta ahora que surge el escándalo toma tales medias la dichosa Internacional. ¿Por qué no lo hicieron antes si era tan evidente? Y mejor aún ¿Lo harán con Cuba? Digo esto porque he visto en algunos medios donde sólo se quiere vincular a Mubarack con Estados Unidos como principal aliado, pero no dicen nada de la auténtica afiliación política que poseía el dictador Egipcio. Así pues, por un lado atentan contra el orden constitucional de algunos países a punta de un ejercicio electoral fraudulento, con el fin de perpetuarse en el poder (caso Honduras), y por otro, resguardan las dictaduras que les convienen.

Hay que estar a la expectativa, porque viendo el caso Egipcio, puede producirse un efecto dominó.

Saludos.