Posiblemente estemos ante una nueva forma de navegar en Internet, hoy en plena etapa de expansión, ya que algunas empresas mercantiles todavía prueban su potencial publicitario y comercial. Asimismo, constatan la capacidad de interacción social y, lo que hasta ahora es relevante, las infinitas posibilidades lúdicas. A esto añadamos instituciones educativas que abren un auténtico sitio (y no página) virtual, lo que representa una forma más atractiva de obtener información, también se persigue el propósito de integrar esta tecnología al campo educativo. Aquí no se descartas antiguo formatos de publicación y edición de contenidos, sino que todos parecen integrarse en uno. Viendo semejantes mundos, no debemos subestimar los entornos gráficos donde los límites de la física ya no representan un obstáculo para la libertad de creativos y curiosos. Aunque cargar estos programas no es para cualquier pinche computadora, que conste.
Quizá para muchas personas, navegar, correr e incluso volar con un Avatar por un paraje idílico sea algo poco serio y hasta resulte infantil con respecto a actividades profesionales, pero lo mismo se pensaba con la interface gráfica basada en iconitos y escritorio virtual, hoy un asunto bastante común en casi todos los ámbitos.
También vemos que el entusiasmo por estas nuevas tecnologías acarrea muchos riegos económicos. Al parecer los mundos virtuales llevan un crecimiento apabullante pero un desarrollo bastante pobre. Islas virtuales prácticamente vacías, donde la creatividad queda esperando en ausencia de usuarios, no digamos para aquellos que han tenido que replantearse sus estrategias de mercado con el tácito fin de, al menos, recuperar parte de las inversiones. Algo que ya había pasado en Internet, si mas no me equivoco a finales de última década del siglo XX.
Los mundos virtuales se prestan para crear nuevas fuentes de trabajo, facilitar la interacción social a distancia, la educación, promover el arte, diversión y el comercio. A pesar de los pro y contra, se abre una nueva brecha vaticinada hace décadas, a parte de los blog, redes sociales y demás engendros absorbentes de la web 2.0.
Saludos.
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2 comentarios:
Creo que los mundos virtuales estan muy lejos de la realidad de Honduras, solo son entretenimiento para algunos hijos de mama y papa.
Por ahora el potencial de los M.V. se concentra en muchos juegos. O así parece.Pero no debemos subestimar su potencial ni limitarlo a este rubro.
Considero que el objetivo de un M.V. no es asemejarse a la realidad de un país o pueblo, sino la de crear uno nuevo.
Saludos Odalis.
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