La película de Martin Burke cuenta a groso modo el nacimiento de las dos grandes compañías que marcaron una auténtica revolución informática, Microsoft y Aplee, específicamente la historia de sus fundadores y guías, Bill Gates y Steve Jobs respectivamente. Es un interesante drama-documental que vale la penar disfrutar para aquellos que no lo han hecho.
Estamos aquí para marcar un punto en el universo. De otro modo, ¿para qué estar aquí? Estamos creando un conocimiento completamente nuevo, como un artista o un poeta. Así es como tienes que pensar esto. Estamos re-escribiendo la historia del pensamiento humano con lo que estamos haciendo*. -
Aunque muchos puedan calificar a estos sujetos como dos codiciosos ricachones, no cabe duda que aportaron, y propagaron también, invenciones que hoy nos brindan muchos beneficios. Pero ante todo, la idea que la copia, por muy ingrata que parezca, es uno de los estamentos de estas industrias, por encima de la originalidad. No han sido viejos inventores sesudos, ni eruditos de academia o sabios experimentados quienes hicieron de las computadoras un enser personal de fácil uso, sino jovencitos medio taimados, nerds amorales, quienes propiciaron parte de la libertad digital que ahora se goza y que otros chicos han emulado también, vemos los ejemplos de Google y Facebook como herramientas de comunicación masiva.
Aprovecho la ocasión para remitirlos a un interesante y controvertido artículo de Albert Esplugas Boter, “Copiar no es Robar”, que nos hace pensar en los dichosos derechos de autor, una medicina que resulta peor que la misma enfermedad.
Saludos
*Comercial de televisión de 1984
Estamos aquí para marcar un punto en el universo. De otro modo, ¿para qué estar aquí? Estamos creando un conocimiento completamente nuevo, como un artista o un poeta. Así es como tienes que pensar esto. Estamos re-escribiendo la historia del pensamiento humano con lo que estamos haciendo*. -
Steve Jobs
Aunque muchos puedan calificar a estos sujetos como dos codiciosos ricachones, no cabe duda que aportaron, y propagaron también, invenciones que hoy nos brindan muchos beneficios. Pero ante todo, la idea que la copia, por muy ingrata que parezca, es uno de los estamentos de estas industrias, por encima de la originalidad. No han sido viejos inventores sesudos, ni eruditos de academia o sabios experimentados quienes hicieron de las computadoras un enser personal de fácil uso, sino jovencitos medio taimados, nerds amorales, quienes propiciaron parte de la libertad digital que ahora se goza y que otros chicos han emulado también, vemos los ejemplos de Google y Facebook como herramientas de comunicación masiva.
Aprovecho la ocasión para remitirlos a un interesante y controvertido artículo de Albert Esplugas Boter, “Copiar no es Robar”, que nos hace pensar en los dichosos derechos de autor, una medicina que resulta peor que la misma enfermedad.
Saludos
*Comercial de televisión de 1984
1 comentario:
La película es muy interesante porque es la historia de lo que hoy ne día muchos usamos. DE igual forma hay una serie de comedia de HBO que se llama Silicon Valley. Se las recomiendo mucho.
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