miércoles, noviembre 25, 2009

Recordando “El Cristal Oscuro” de Jim Henson y Frank Oz

The Dark Cristal, película de fantasía de los años ochenta, es sin duda uno de mis títulos predilectos, recuerdo de aquellos tiernos años de infancia. El punto destacable del film es la ausencia total de seres humanos, relegando el protagonismo a títeres altamente complejos. Provista de escenarios originales y bien trabajados, proyectan un mundo tétrico lleno de criaturas deformes y atormentadas, que al final de la historia se trasforma en un paisaje ensoñador.

Místico tocando un raro instrumento de cuerdas

La trama es clásica. Cuando Henson y Oz con su argumento parten a los legendarios Urskeks debido a la ruptura del Cristal Oscuro, fuente suprema de poder, donde surgen dos razas antagónicas (Místicos y Skekses) que simbolizan el bien y el mal respectivamente: una impulsa a la sabiduría, la otra a la crueldad y el sometimiento. En cierta forma denota que tales fuerzas, al menos vistas como tendencias, son inherentes a cada ser humano, inseparables del mismo. El desequilibrio a favor del mal contrae repercusiones nefastas. La película parece ir dirigida a un público bastante joven, no obstante, discernir con amplitud la moraleja requiere una mentalidad adulta.


Dos terribles Skekses

Por supuesto, no puede faltar el héroe al puro estilo David contra Goliat, personificado por otra raza humanoide primitiva llamada Gelflings (Jen y Kira), cuya misión es salvar el mundo del cruel despotismo de los putrefactos Skekses que amenaza con volverse eterno.


Los Gelflings Kira y Jen

Cada Eskekses parece obedecer a la consumación de un pecado capital (Ira, codicia, gula, etc.) mientras que en su contraparte Mística aflora la virtud que la supera. Tras la humilde apariencia de los Gelflings se esconde una voluntad encomiable capaz de superar cualquier obstáculo pues, desde el principio, se presagia una contundente victoria sobre el mal; es así como Jen, discípulo de los Místicos, recompone el poderoso Cristal tras la aparición de un evento cósmico.

Corría la noticia por Internet que, a más 20 años desde su primera aparición en cine, El Cristal Oscuro tendría una merecida secuela denominada: El Poder del Cristal Oscuro. Por desgracia Jim Henson falleció antes de terminar la producción. Ignoro si todavía está en proyecto. De todas formas, se trata de otro clásico incomprendido en su época, pero que con el paso de los años se ha convertido en una auténtica joya del cine, y sin dudas en un grato recuerdo.

Saludos.

1 comentario:

Irina Orellana dijo...

David:

Yo vi esta película en el cine con mi padre, y recuerdo muy pocas escenas, pero me fascino! Tenía apenas 10 o 12 años....