La izquierda internacional se confabula para imponer en Honduras la democracia cosmética, siempre a expensas del pueblo que tiene voz pero no voto en la política local; intentan obligar a Mel y Micheletti para que firmen un pacto que lacera nuestra Constitución. Y mejor ni hablar de leyes, porque ha quedado bien claro que ninguno de los protagonistas de esta tragedia, tanto nacionales como internacionales, las respetan, y por ende, las cumplen. Esto es lo que caracteriza de forma fehaciente dicho conflicto.
El gobierno actual nos saca carrera con los toques de queda, sacrifica la economía del país para tener prisionero al saltimbanqui folklórico, convirtiendo la embajada de Brasil en una lujosa bartolina provisional. Pero el irreversible infiltrado tiene su propia agenda, acicatea con su discurso incendiario a la prole de mercenarios que vanamente intenta generalizar en los medios, hasta que Lula le llama la atención, porque claro, Mel busca lo de siempre, la agenda de Chávez, es decir, algo que no lo deje como un reyezuelo de salón, tal y como lo pretenden Arias y Washington.
No sé dónde y cuándo terminará este conflicto, y lo importante: cómo se solucionará a fin de cuentas, ya se vislumbraba una luz al final del camino con las elecciones libres; aunque sigo optimista en esta vía, un presidente electo y reconocido echará al trasto el pérfido expansionismo chavista en Honduras. Panamá es el primer valiente en reconocer semejante lógica, luego otros lo harán. Ojalá que así sea.
Pese a todo, la intuición me dice que cada sinvergüenza que nos puso a todos los catrachos en este embrollo, no importa la facción política, nación o grupo que represente, recibirá su merecido en el futuro. La justicia, otra de esas tantas esperanzas que uno no desea perder.
Saludos.
El gobierno actual nos saca carrera con los toques de queda, sacrifica la economía del país para tener prisionero al saltimbanqui folklórico, convirtiendo la embajada de Brasil en una lujosa bartolina provisional. Pero el irreversible infiltrado tiene su propia agenda, acicatea con su discurso incendiario a la prole de mercenarios que vanamente intenta generalizar en los medios, hasta que Lula le llama la atención, porque claro, Mel busca lo de siempre, la agenda de Chávez, es decir, algo que no lo deje como un reyezuelo de salón, tal y como lo pretenden Arias y Washington.
No sé dónde y cuándo terminará este conflicto, y lo importante: cómo se solucionará a fin de cuentas, ya se vislumbraba una luz al final del camino con las elecciones libres; aunque sigo optimista en esta vía, un presidente electo y reconocido echará al trasto el pérfido expansionismo chavista en Honduras. Panamá es el primer valiente en reconocer semejante lógica, luego otros lo harán. Ojalá que así sea.
Pese a todo, la intuición me dice que cada sinvergüenza que nos puso a todos los catrachos en este embrollo, no importa la facción política, nación o grupo que represente, recibirá su merecido en el futuro. La justicia, otra de esas tantas esperanzas que uno no desea perder.
Saludos.
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2 comentarios:
Estimado David: Ojalá que tus deseos se cumplan y que cada "sinverguenza" o mal nacido hondureño que haya abonado para caer en esta situación, pague por sus actos...la justicia Divina no falla.
Esperando que te encuentres bien, y que no hayas tenido problemas con las compras de víveres.
Animos!!!
Irina Orellana
Saludes David me llama mucho la atencion de lo que bien dies como estos medios Pro Zelaya motivan a la gente y sin duda debe ser cierto tambien que tienen algunos cabeza caliente en nomina llamando para hacer creer que hay mas personas con eso odio desmedido hacia los demas recien vi una excelente pelicula sobre la guerra civil y posterior genocidio de Ruanda y me llamo mucho la atencion como el tribunal para crimenes de guerra considero delito a los miembros de una emisora que sin empuñar un fusil motivaron a la gente de participar y matar sus vecinos y amigos solo por pertenecer a otra etnia sera que en Honduras llegaremos a eso
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