Se agudiza la crisis

Era de esperarse que el improvisado gobierno de Micheletti no sea capaz de manejar este horrible conflicto y que, lejos de ver una mejora, la situación se pone cada vez más inestable. lo peor, es el doble discurso gastado al tratar de defender con patrañas la incómoda posición en la que se encuentra.

Si Zelaya tenía una orden de captura, pues lo mejor era permitirle la entrada al país y arrestarlo. El argumento de evitar un baño de sangre es una forma de enmascarar el temor, porque el mismo gobierno no cumple con la ley del cual se jacta proteger; de todas maneras ha sucedido la tragedia, o tenía que suceder en algún momento, por desgracia. Ya conocemos aquí como son los grupos que apoyan a Mel.

Cierran los aeropuertos para luego decir que tienen las puertas abiertas a todos. Ya veo que, a parte de ceder ante amenazas, mismas que ahora los obligan a buscar el diálogo internacional, quedan en ridículo. ¿Y así pretenden sobrevivir hasta la nueva toma de mando presidencial?

En el otro polo de la hipocresía, me queda claro que Insulza se inclina a favor del bloque chavista. Necesita más votos para reelegirse en su cargo. Viene a Honduras con supuesta autoridad para exigir, cuando el organismo que representa no es un tribunal de justicia; luego se presta a un juego provocador, seguramente planeado para tentar al gobierno a que actúe de forma hostil y esto tenga repercuciones. Cuestiona el derrocamiento de Zelaya, pero no increpa a Chávez por hacer amenazas de invasión militar, lo cual es totalmente improcedente. Estos “protectores de la democracia”, suspenden a Honduras de su organización, asumiendo que los latinoamericanos ya hemos superado el período de dictadoras, sin fijarse en Cuba; lo peor de esta doble moral, es ver a los que condenan el contragolpe, exigir la incorporación de Cuba a la OEA. Tienen miedo de perder a Honduras, porque serviría de inspiración para que otros pueblos se les revelen. También pretenden sancionar al nuevo gobierno, aislando al país, lo que podría cortar ayudas internacionales que van en detrimento del pueblo, no de la clase política. Esto es un chantaje institucionalizado. Está claro que sólo les importa el poder.

Es sumamente necesario que USA tome protagonismo en el asunto para crear un equilibrio de fuerzas diplomáticas. De lo contrario los hondureños estamos a merced de estos dictadores modernos. No se puede solucionar el asunto cuando todas las partes ponen violencia, nadie quiere dialogar, sólo exigir, entonces de nada sirven los organismos internacionales para preservar la paz.

Mel Zelaya cometió delitos de traición a la patria y no merece ser presidente de Honduras. Por otro lado, aquellos que expulsaron a Zelaya de esa manera, y crearon esta crisis, le deben al pueblo una explicación, y no están exentos de responsabilidad.

¿Cómo se resolverá este lío que nos agobia?

Creo que la mayoría de los hondureños queremos estas cosas, independientemente de cómo se solucione la crisis:

• El respeto a nuestra actual Constitución y que nadie atente contra la misma. Ni hoy, ni mañana.
• Que respeten nuestras instituciones democráticas (Poder Judicial, entre otras) y no nos obliguen a contradecir nuestra ley para imponer a un presidente criminal.
• Que ningún gobierno provisional, de facto o lo que sea, restrinja nuestras libertades individuales.
• Que nadie impida las elecciones democráticas programadas para el presente año, ni la debida sucesión al poder que se debe celebrar para el siguiente.
• Que nadie nos agreda o perjudique con bloqueos o invasiones militares.

Saludos.