martes, julio 17, 2007

Gobierno Empresario

Hondutel entra a competir en el mercado de la telefonía móvil con las empresas del sector privado aquí en la capital. Miren ustedes que bonito. Cuando uno de hondureño lo que espera de un gobierno liberal es precisamente todo lo contrario. Fomentar la inversión privada, promover la competencia leal y justa que le permita a los compradores tener servicios de calidad a bajo costo; pero ante todo, la no intervención estatal en materia comercial debería ser la postura adecuada de un partido político que se precie de llevar ese nombre, liberal. En lo personal, no veo justo que los gobiernos compitan con el sector empresarial privado. Recordemos que el estado exige a las personas naturales y jurídicas impuestos con los cuales sostener sus instituciones, a parte de ello, cualquier empresa privada también tiene que ver reducida aún mas sus ganancias (porque eso hace la competencia) ante un agente que interpreta un doble papel, de jugador y arbitro en el mismo juego. Esto resulta improcedente.

Durante décadas las empresas estatales han demostrado ser deficientes a la hora de satisfacer las demandas de la ciudadanía y, precisamente, esos ciudadanos tienen que pagar caro el despilfarro y la mala administración a que son sometidas por los políticos de turno, llevándolas casi al borde banca rota como se dice, o cayendo en tremendos endeudamientos y negocios medio raros que encarecen el servicio que prestan.

Considero que las funciones principales de un gobierno liberal debe ocupar sus recursos e ingenio para:

1.-Como ya dije, fomentar la inversión privada y extrajera que promueva la producción y el trabajo, creando un ambiente propicio para ello, estimulando la competencia empresarial que no perjudique a las personas naturales, sino más bien que fomente el desarrollo individual.
2.-Invertir sus recursos en Educación, Salud, seguridad para personas marginadas y protección al medio ambiente.
3.-Dejar de joder con políticas intervencionistas que distorsionen el desarrollo libre del comercio. Es decir, no a un comercio controlado por el estado. No a un plan de desarrollo nacional.
4.-Ser árbitro en este esquema comercial para evitar abusos o violaciones por parte de un sector en particular mediante el uso de las leyes y los sistemas judiciales, lo cual se logra siendo imparcial y objetivo, de otra manera no se tendría credibilidad en la justicia del país.

Algo así creo serían las medidas lógicas o esperadas de mentes liberales. Resulta fácil escribirlo, sin embargo es tarea ardua llevarlo a cabo, tanto así que “parece” ser más fácil poner a competir al estado con sus contrubuyentes forzados. Con un esquema político liberal de verdad, el desarrollo económico del país queda en manos del sector privado (nacional y extranjero), los gobiernos simplemente son servidores y facilitadotes de desarrollo (cultura no paternalista) y, del otro extremo, probablemente de mayor importancia, el estado asegura la justicia en el territorio. El poder judicial debería ser el más importante en una república. Pero no.

Bien me decía Ardegas que el grupo de Patricia Rodas tiene una fuerte influencia en Mel, cada día voy comprobando eso.
…y bien me decía el Amigo Mikel, al cual extraño en el Internet, con una sentencia bien clara aplicable a muchos países:

“El Gobierno metido a empresario es mal negocio para todos”.

Saludos.

PD: Saludos a mis influencias.

2 comentarios:

Ardegas dijo...

Hola David.

Este gobierno no tiene ideas claras sobre como gobernar el país. Es cierto que el partido en el poder dice ser liberal, pero obviamente no puede ser liberal en el sentido que esa palabra tiene en Europa. Es curioso como las palabras cambian de significado. Las influencias de Mel más bien son de tipo socialdemócrata, él considera que el Estado tiene un papel fundamental y debe intervenir decisivamente en la economía. Oí que Patricia Rodas quería cambiarle el nombre al Partido Liberal para que pase a llamarse "Partido Liberal Socialista".

Por otra parte, si Hondutel logra competir exitosamente ofreciendo precios bajos en telefonía celular me da una idea de las fabulosas ganancias que obtienen las transnacionales Celtel y Megatel, que son prácticamente un oligopolio protegido por el Estado. Aquí está prohibida la entrada a nueva competencia hasta que al gobierno se le antoje. Celtel tuvo siete años de monopolio en el que se llegó hasta el extremo de cobrar al que recibía la llamada además de cobrársela al que la hacía. Y es difícil criticar a estas compañías en los medios de comunicación, ya que controlan cualquier crítica adversa por medio de contratos de publicidad.

David Morán dijo...

Ardegas, me da mucho gusto saber que te pasas por este humilde espacio. Pues sí, es evidente que el Partido Libertino de Honduras anda dividido en varias facciones, muchas de ellas con aspiraciones presidenciales. Es evidente también que el término libertad es tergiversado de mil maneras, aquí tampoco lo entienden como los estadounidenses. Me hace gracia lo que dices de la señora Rodas, al menos no esconde sus pretensiones del todo, simplemente habría que recomendarle que quite la palabra liberal de su concepto para que la sinceridad sea absoluta, al menos muchos sabrás por quien votan.

Comparto tu apreciación sobre las empresas de telefonía celular, el servicio aún sigue siendo un timo al cual casi todos estamos obligados a participar por culpa de estos gobiernos progres. Aunque por ahora yo me doy el lujo de no participar. Desde hace tiempo hubieran traído competencia verdaderamente agresiva para estas compañías.

Saludos.