martes, enero 13, 2009

Democratización de la literatura


La democracia es un sistema que puede ser aplicable más allá del contexto político tradicional, los grandes avances en tecnología, como el desarrollo Internet, han generado medios donde el poder es trasferido a las personas comunes quienes deciden, gracias a ciertas libertades, el tipo de información que buscan, reciben o comparten con otros. Pero el asunto no acaba ahí, los internautas, juzgan qué es lo más importante dentro del mismo maremágnum ciberespacial. El punto álgido radica en validar los criterios para evaluar las publicaciones en la web, pues esto los hace más confiables, por lo que se requerirá mayores conocimientos para tal menester, conocimientos que desde luego ya no se encuentran monopolizados. Es evidente que democratizar la literatura implica un gran riesgo; sin embargo, es mucho mejor que la metodología donde unos pocos deciden por todos.

La web 2.0 es un canal democratizable, mientras los Estados, con sus regulaciones sectarias, procuran amaestrar a una bestia indómita (Internet). La web 2.0 genera una difusión de interacción social activa y constante para la libertad de expresión, haciéndole el trabajo más difícil a la corrección política. En el caso de la literatura, ya no es necesariamente un editor tendencioso quien decide lo que la mayoría debe leer, como ocurre en los medios tradicionales (Periódicos, revistas y demás casas editoriales), ahora los escritores pueden publicar sus obras en editoriales electrónicas de mayor flexibilidad y envergadura, mientras otros expresan su sentir y pensar a través de blogs. El otro grupo que conforma este importante binomio comunicacional, los lectores, también salen beneficiados con la democratización literaria, pues su criterio gana peso a la hora de estimar las lecturas que escoge a cuenta propia. Su Trabajo, tesonero cabe señalar, consiste en buscar la calidad disponible, sin tener que aferrarse necesariamente a una crítica formal cuyo discernimiento no siempre resulta ser del todo acucioso.

Saludos.

4 comentarios:

Luis Amézaga dijo...

Como tú has apuntado en alguna ocasión existe el peligro de que se cuele mucha porquería por ese colador tan generoso. Pero cabe la pena correr el riesgo.

Anónimo dijo...

A la gente lo que quiere, no hay de otra digo yo, jejeje.

Ysaías Núñez dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
David Morán dijo...

Por supuesto Ysaías,contamos con la capacidad de elegir, y ahora se van añadiendo nuevas alternativas de publicación.

Saludos.