lunes, abril 24, 2006

Liga Nacional de Fútbol

Cada vez me dan menos ganas de sentarme en el sillón a ver por la TV un partido de fútbol de la liga nacional, solía ser mi costumbre en uno de esos parsimoniosos fines de semana donde no tienes nada bueno que hacer. Gustaba de estar informado sobre cualquier detalle del acontecer futbolero, ahora, me conformo con leer los resultados de la semana en los diarios, y hasta para eso me muestro algo renuente. Hoy el fútbol ha dejado de ser prioridad incluso para muchos seguidores y aficionados incansables que han decidido abandonar (por los momentos) las graderías de los coliseos romanos modernos. El fútbol ya no es lo que era antes y eso lo podemos analizar desde muchos ángulos:

Tácticas de juego
El fútbol es entretenimiento, espectáculo, diversión, precisamente eso esperan encontrar los hinchas de cada club en un partido de 90 minutos, desean que su boleto les proporcione elevada rentabilidad emocional; lógicamente ansían que su equipo rellene la portería contraria de cuanto gol le quepa, puesto que los jugadores son impulsados por una hambre insaciable de victoria, fama y conquista; agreguemos a eso el ingenio mental, la agilidad y fuerza física y una buena dosis de adrenalina que deben poseer para cumplir tal empresa. Pero si los aficionados se topan con equipos que sólo van a proteger resultados, donde los directores técnicos emplean esquemas tácticos que protejan las finanzas del club y se conformen con sumar puntos en la tabla de porciones, el resultado obviamente es otro. Partidos pobres, futbolísticamente hablando, pueblan el panorama los fines de semana; llega la decepción, el aburrimiento y, me imagino yo, esa sensación de sentirse estafado al salir del estadio, peor aún si el equipo amado no saca ni un pinche punto del encuentro. Las únicas ganas que restan son la de no volver a los estadios por mucho tiempo. Eso parece ocurrir en Honduras en esta temporada.

Protección a la mediocridad
Si los jugadores nacionales no dan la talla para proporcionar buenos espectáculos a su afición, peor que eso, ni ganan partidos, entonces es hora fichar opciones fuera de la frontera y reforzar de cuanto jugador extranjero sea necesario (y posible económicamente hablando) al club de casa, no importando el número de estos en la cancha a la hora de jugar. Y si los de aquí desean la codiciada titularidad, pues que se la ganen con creces. Mejorando su técnica e inteligencia cinestésico-corporal podrían ser más competitivos. Pero muchos dirán: “precisamente por esta razón las normas ordenan que se proteja al jugador hondureño, limitando la cantidad de jugadores extranjeros en la cancha, lo que permite a los nacionales desarrollar sus habilidades. De esta manera tendremos jugadores de calidad que integren sólidas selecciones nacionales para clasificar al mundial de fútbol”. Ahora yo digo: estos esquemas proteccionistas nos han dando tan un sólo un resultado en 25 años de esfuerzo, ese resultado se llama España 82, de ahí en adelante nada, absolutamente nada de clasificaciones. Podrían extender mi tesis en este punto pero requeriría de un post entero, por ahora sólo lo sintetizo en este párrafo.

Vanos esfuerzos por alcanzar la clasificación al mundial de Alemania 2006.
Muchos relacionan la falta de motivación por asistir a los estadios a la prematura descalificación de la selección nacional de Honduras del mundial que se celebrará muy pronto. Después de España 82, siempre hemos estado a un pelo, a unos puntitos de clasificar, pero al final perdemos y nos quedamos en casa apoyando a selecciones que inclusive desconocen la ubicación de nuestra querida patria. En esta ocasión fue lo peor, perdimos en las primeras rondas clasificatorias, lo cual es una solemne y del todo aborrecible vergüenza. La mayor parte de la responsabilidad se la atribuyo a los directivos del fútbol nacional que, una vez mas, han demostrado que son una partida de incompetentes. Primero, por perder el tiempo con un director técnico de renombre internacional que desconoce nuestro fútbol y cobra carísimo a un pueblo pobre; segundo, por reemplazarlo por otro técnico nacional con tan poca experiencia que no era capaz ni siquiera de realizar un cambio de jugador en un partido crucial, cuando tal cambio táctico era urgente. Así pues, a la mayoría de los aficionados de este noble deporte les vale madre cualquier proyecto Goal, lo que todos desean ver a Honduras nuevamente en un mundial de fútbol haciendo un papel decoroso, dejando el nombre de nuestro pueblo en alto y no sirviendo de fogeo para una potencia futbolera.

Salvo el partido del domingo 23 de abril protagonizado por los dos mejores clubes de Honduras, los archirivales Olimpia y Motagua, que intentaron por todos los medios dar un buen espectáculo, nada ha llamado mi atención en este deporte.

Concluyendo

-Jugar por sumar puntos y no por brindar buenos espectáculos demerita el fútbol local y desmotiva al consumidor de este rubro. Gastar su dinero en partidos aburridos no es buena inversión para el aficionado. Es innegable que el fútbol es un negocio, pero recordemos que es un negocio de entretenimiento y diversión. Ojo dirigentes.

-Requerimos tácticas abiertas que mejoren la dinámica de los partidos, en el riesgo está la excitación.

-Las políticas proteccionistas no nos han ayudado mucho en materia económica, social ni mucho menos deportiva. Permitámosle a los clubes y a su afición decidir por sí mismos aquello que le conviene a su equipo, sin tener barreras que restrinjan el sano desarrollo del fútbol tanto como deporte, negocio y fuente de trabajo. Miremos el fútbol español o el italiano.

-Si Honduras no llega al mundial de fútbol, los demás proyectos en relación al fútbol carecen de sentido, porque todos los que aman este deporte en Honduras tienen un sólo sueño y esperan que los dirigentes de las selecciones nacionales lo concreticen, sino, habrán fracasado rotundamente.

Algunas humildes sugerencias.

Personas que practican otros deportes se quejan que en Honduras únicamente se brinda apoyo al fútbol, pues bien, es tiempo de girar la mirada a otras disciplinas deportivas ya que el fútbol en la actualidad parece no divertir como en antaño. Por lo tanto me atrevo a sugerir las siguientes alternativas.

Ligas de:
-Voleybal femenino, sugiero uniformes para las jugadoras más cortos y bien ajustaditos.

-Voleybal de playa, no hacen falta ajustes al uniforme siempre y cuando se utilice un bikini sexy llamativo.

Basket ball Femenino: Con la sugerencia de eliminar esos uniformes masculinizados que utilizan las jugadoras, es mejor cambiarlos por conceptos similares al Voley de esta categoría, es decir, mucho más cortos y bien ajustaditos a las curvas femeninas.

-Otros deportes que el amigo lector sugiera, siempre y cuando sea en la categoría femenina, con uniformes cortos y bien ajustaditos que resalten el desarrollo físico logrado por la práctica del deporte sugerido.

En fin, a mi no me gusta para nada el Voley, lo detesto, me trae males recuerdos. Pero sé que de igual forma uno se podría entretener. Por algo se empieza, digo yo.

Saludos y perdonen la extensión.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

felicidades éste post pasará a la historia en el munfo blogger hondureño (nada de profecía)

Con tus sugerencias solo puede decir: Tienes la boca llena de razón!!!

Gracias por darnos otra visión de las cosas. A propósito... Viva el Olimpia!!! jejejeje

David Morán dijo...

El Olimpia vivirá por siempre Cesarius, esperemos que sume otro título mas esta temporada.

Que viva el León!!

Johnymepeino dijo...

Acá empezaron escribiendo así y cuando han llenado la liga de fútbol con extracomunitarios han descubierto que las "estrellas" del futbol no dan espectáculo, ni marcan porque no sienten los colores del equipo, porque no vibran con la nación (E'to y Ronaldinho son cosa aparte).

Ahora la afición enloquece con los equipos chiquitos que tienen gente y estadios pobres pero que hacer virguerías con el balón.

Ojalá no sea así en Honduras pero aquí pasó así.

Luis Amézaga dijo...

Un partido de fútbol con jugadores desmotivados y carentes de talento, es probablemente una de las cosas más aburridas que existen y que duran 90 minutos. Si encima no hay la tensión de jugarse algo relevante, es mejor el suicidio colectivo.

Eso sí, me apunto a tus sugerencias de otros deportes femeninos, a ojos abiertos :)

David Morán dijo...

Johnymepeino: Los equipos como el Real Madrid y el Barcelona tienen muchos aficionados por aquí, todo el mundo conoce la popularidad de estos equipos. lo que probablemente sucede con el bajo redimiendo de este tipo de jugadores es que los idolatran demasiado, además, los fuerzan jugar un sin fin de partidos sólo para ir ganando dinero y fama para el club. Ese exceso de trabajo los descompensa y a la hora de los partidos cruciales la afición contempla puros cohetes quemados en la cancha, mismo que echan por el caño todo el esfuerzo de las temporadas en un mes.

Gracias por ampliar este tema con tu comentario, ojala y el fútbol hondureño mejore como tu dices.

Amigo Mickel: ¿Y en Vitoria no hay liga de Voley femenino?

Saludos.

Luis Amézaga dijo...

Aquí hay mucho femenino que juega con las pelotas, pero Voley no. :)