jueves, marzo 23, 2006

Los ejes del poder

A través de los milenios los seres humanos hemos sido gobernados por tres principales fuerzas, cada una de ellas es producto del desarrollo de las sociedades y, por ende, de la humanidad; estos fuerzas, que su vez son pilares que sostienen y rigen nuestros destinos, impulsan el progreso gracias al empleo del arte, la tecnología, la ciencia y el conocimiento, sus advenedizos irremplazables.

Estas fuerzas, antagónicas entre sí por mera naturaleza, han disputado y concentrado el poder para su beneficio particular en distintas épocas. A cada una le ha tocado dominar y amansar a las dos restantes; cada una ha procurado mantener su hegemonía durante el tiempo que le ha sido posible; cada una a debido negociar con las otras para poder sobrevivirles, a pesar de que semejantes tratos vayan, incluso, en contra de sus cánones o doctrinas mas sagradas, esto lo hacen cuando callan, cuando dejan pasar o, simplemente, cuando avalan el accionar de las otras.

La vida de las personas comunes, las ejecutoras, desde temprana edad se ve configuradas sin remedio alguno por la voluntad trinitaria que coloca en ellos sus signos: uno en la frente, otro en el corazón y el último en la palma de la mano, trazando así los diferentes caminos por los cuales habremos de transitar. Así, todos tomamos sus valores, sus leyes, sus ideologías, nos resta vivir en el espacio que delimita su triangular horizonte, inclinándonos hacia cualquiera de sus polos.

Hablo pues, como ya habrán deducido, del poder político, religioso y económico. Resta hacer algunas cuantas preguntas con el propósito de ir explorando criterios: ¿Cuál de las tres, en la actualidad, llevan la batuta del destino del mundo? ¿Acaso una gobernará tras el trono de la otra? ¿Existirá, acaso, un cuarto poder escondido entre las sombras? ¿En Honduras, quiénes son los culpables de nuestro poco desarrollo?

Saludos

9 comentarios:

Luis Amézaga dijo...

La trinidad: política, religión, economía. Tres en uno, el poder. El poder que inventa el hombre porque se siente indefenso. Y me pregunto, ¿indefenso ante qué? Y me pregunto ¿poder sobre quién? El hombre maneja su santa trinidad aquí en la tierra como mejor sabe.

David Morán dijo...

Comulgamos con ellas para no sentirnos indefensos, los que no temenos tanto acceso a ellas quedamos en el avandono.

Saludos.

wilson dijo...

¿Cuando no fue el poder económico el hegemónico?

Irina Orellana dijo...

Estimado David:

Creo que en nuestra querida Honduras, es el poder económico, el que se encuentra por encima de todo, o casi todo. Ya ves que en nuestro medio se ha hecho muy famoso y verdadero el conocido dicho (tomado de una famosa canción): "Por la plata baila el mono". Es decir, que quien tiene el billete, tiene el poder, todos le rinden pleitesía...muchas veces le temen y casi siempre les "respetan".

Es tan grande ese poder, que en el plano político y muchas veces en el religioso, las cosas se pudren o toman otros tonos...y todo por el maldito dinero, el cual no se utiliza como un medio, sino como un fin.

Saludos!

David Morán dijo...

Buena pregunta Wilson, supongo que no ostentó la corona cuando el poder político y religioso estaban atados en un nudo que llamaron estado, claro, eso no quiere decir que prescindieron del poder económico para lograr sus fines. Bueno, esa es mi opinión.

Irina, soy de la misma opinión que tú con respecto al poder reinante, por supuesto, esta ambiente no esta provisto solamente de aspectos negativos, no podemos negar que estas tres fuerzas han desarrollado las sociedades en que vivimos, a ellas les debemos casi todo.

Saludos.

Anónimo dijo...

La pregunta que salta inmediatamente a mi conciencia es: ¿Que cuota de responsabilidad tengo yo?

Definitivamente que mirar la vida como "malos" y "buenos" o cómo "explotados" y "explotadores" no nos ha permitido escalar a estadios de superación disitintos, como por ejemplo los que mencionas.
Cómo es mi actitud hacia la politica? Apática? desentido? o simplemente no me importa?

Cómo percibo lo sacro? la belleza de la creación?

Cómo reacciono ante lo difícil de la situación económica? Me quejo eternamente? Culpo a los gobernantes de mis desgracia? Pierdo la fé y la esperanza?

En resumen, mi trabajo, mi actitud, mi manera de afrontar los retos y asumir mis responsabilidades junto con asumir las consecuencias de dichas responsabilidades, son las que me permiten ver el vaso medio lleno y no medio vacío.

Y entonces porque tanta maldad, tanta corrupción, tanto alejamiento de lo sacro, tanto pobre? Será qe Dios se olvido de nosotros?
Estoy... y estamos para cambiar la historia, no digo que es solamente retórica vacía, es una cultura de vida.

Yo personalmente me apunto.

Saludos

Michi dijo...

Show me the money!! Creo que la pasta lo mueve todo...al fin y al cabo, podemos vivir sin politica y sin religion pero sin dinero???

David Morán dijo...

Cesarius, concuerdo contigo en que los protagonistas y responsables de la historia somos nosotros mismos; la actitud que poseamos y la responsabilidades que asumimos condicionan en cierta medida nuestras perspectivas acerca del mundo que nos rodea, es indudable. Obviamente el texto parece traer consigo una atmósfera de resignación ante la potestad de un poder trinitario que, aparentemente, no se puede acceder (así como lo plantea Kafka en su novela El Castillo), quedando sólo la resignación de acatar la orden, la ley o la doctrina, en otras palabras, seguir con un destino predeterminado. Lo cierto es que podemos asumir el control o, lo que es lo mismo, ser parte del mismo de diversas maneras, y no solamente eso, también podemos aprovechar sus facultades (de los ejes del poder) sin tener que percibir nuestro alrededor con una actitud pesimista, sino mas bien trabajar sobre una visión trasformadora y constructiva , sin dejar por fuera el juicio crítico; creo que eso si nos encaminaría a una cultura de vida a la cual me apunto yo también.

El error de los hondureños, en mi opinión, no radica en señalar y recalcar los principales problemas que tenemos, sino en pensar que nunca podremos solventarlos y mejorar nuestra situación. Por eso es que avanzamos muy lentamente.

Enlazo “Cesarius Revolution” a mis blogs, saludos.

Don Michi, yo creo que podemos prescindir de los tres por algún tiempo, y no nos iría tan mal, pero volverían a surgir. La política para organizar y ejecutar, lo económico para comerciar y Dios no va dejar que nos olvidemos de él tan fácilmente, como sea que se le conciba. Eso si, sin las mujeres, la comida y los autos deportivos no vamos a ningún lado. Je, je.

Anónimo dijo...

David entonces... estamos totalmente de acuerdo, en sintonia y en la misma linea.

Con repecto a:

El error de los hondureños, en mi opinión, no radica en señalar y recalcar los principales problemas que tenemos, sino en pensar que nunca podremos solventarlos y mejorar nuestra situación. Por eso es que avanzamos muy lentamente.

Propuestas como este blog me indican que muchos de nosotros (los catrachos) no nos quedamos como meros espectadores del entorno de nuestro país sino que también damos un paso adelante hacia el desarrollo integral de nuestra sociedad.<

Enlazado oficialmente a Cesarius Revolutions